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Hombres, venid a este encuentro: Emma Watson y su “HeForShe”

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Revisen nuestra historia y vean todas las cosas que se han dicho con respecto a nuestro sexo, nuestra orientación y lo que se supone deberíamos “ser” a partir de ello. Mucha gente, pero muy sobretodo, muchas mujeres a través de los siglos han perdido su vida en manos de personas que valiéndose de instituciones que pretenden definir lo que se debe o no hacer, sentir, decir o pensar, se sientan en las veces de jueces para sentenciar, en base a las ideas con las cuales los amamantaron.

Sin embargo pese a que, sí, las mujeres han tenido una larga batalla por defender sus derechos, teniendo como resultado que en nuestro mundo moderno las mujeres han llegado incluso a sentarse en sillas presidenciales y dirigir el destino social, económico y político de millones de personas, el caso es que la diferenciación de nuestros sexos sigue siendo un tema presente, solo que desde otra perspectiva.

A todo esto, la actriz Emma Watson, recordada por muchos por su papel en la saga de películas de Harry Potter con el personaje de Hermione Granger, ha recibido recientemente la distinción de poder dar unas palabras como embajadora de la ONU Mujeres; de una manera sencilla pero sustancial, Emma logra dar unas sentidas palabras sobre su consideración y su posición sobre el término “feminismo” y el papel tanto de mujeres como de hombres, pero haciendo un llamado muy especial a los hombres a sumarse al importante asunto de la discriminación, presentando su plataforma “HeForShe”.

Yo no sé mucho sobre la historia del feminismo como movimiento de reivindicación social, político y económico de las mujeres y su sentido de igualdad de condiciones en relación al lugar que ocupan los hombres. El feminismo nace como movimiento a favor de los derechos de las mujeres en la segunda mitad del siglo XIX, pero su auge comienza a principios y mediados del siglo XX, proponiendo y provocando una serie de hechos que garanticen que hombres y mujeres tengan, como miembros de una misma especie (al menos entiendo que es en ese sentido), los mismos derechos, privilegios y oportunidades.

Dicha iniciativa tiene varios subgrupos y/o movimientos alternos que en la actualidad se le han unido y añadido otras causas, como la lucha por los derechos de la comunidad LGBT, la lucha en contra de la discriminación racial (sí, hay existe), entre otras.

En fin, la cosa es: igualdad pese a genero y/u orientación sexual. O en términos instaurados por el feminismo: es una lucha en contra del “patriarcado” sistema. Vienen a mi mente muchas cosas leídas en Freud y en Lacan en relación al padre.

Pero retomando las palabras de Emma Watson, hay algo en particular en su posición que me llama la atención: Emma hace un llamado a los hombres a sumarse a esta causa, haciendo claramente una diferencia entre el feminismo, y que eso tenga algo que ver solo con las mujeres. Lo cual me parece algo genial de su parte.

Ahora bien, desde hace tiempo he considerado que el feminismo, o para no nombrarlo en un sentido general, he considerado que la actual posición de las mujeres es un “espectro” que se reviste de una sutil posición “masculina”. Un poco en palabras más básicas: las mujeres se han vestido con el traje de ejecutivo que ha hecho de los hombres un cliché desde hace siglos. Y por “masculina” no me refiero al hombre en tanto genéticamente son la suma de un cromosoma X y Y.

He considerado que esta lucha de las mujeres durante tanto tiempo no ha sido para crear una posición propia desde su quehacer como mujeres, sino para reclamar un lugar “en igualdad con los hombres”, borrando los matices de una diferenciación sexual marcada por ambas posiciones, tanto esa posición del “yo tengo” masculina (yo tengo derecho, voz, voto), como de esa posición más sumisa o receptiva que se le ha adjudicado a las mujeres (por lo mismo, las mujeres son más receptivas con sus emociones, con sus faltas).

Ojo, no estoy diciendo que dicha lucha como tal no haya traído cosas positivas, ya que gracias a muchas cosas que se lograron y a la “mandada ar coño” que le dieron al sistema precario que venía desde hace siglos siendo ejercido, gracias a eso, las mujeres hoy en día pueden desarrollarse. Mi punto es que el feminismo visto desde esa radicalidad de imposición de un sexo en tanto genético sobre otro, pone en manifiesto que el problema es que las mujeres deben hacerse valer teniendo una posición igualitaria con los hombres ante el mismo sistema.

Y digo esto porque Emma Watson expone algo muy importante: los hombres siguen sin querer cambiar de posición (aunque ciertamente sí lo han hecho un poco). Siguen siendo poco receptivos con sus emociones. Siguen sin darse permiso para sus “debilidades”.

Inclusive, yo me he encontrado con chicas que ven esas cualidades en hombres y las califican como débiles o “poco masculinas”: muchas mujeres siguen buscando al “viejo” hombre, es decir, el hombre “masculino”, el que las protege cual caballero medieval. ¿Qué hacen muchas mujeres al enterarse que un hombre baila, canta, actúa, escribe, pinta o es alguien muy sensible? Les parece alguien “poco masculino”, es decir, las mujeres siguen encarnando al hombre del traje de ejecutivo que les mencioné antes, ah, porque un hombre en traje de ejecutivo si “parece un hombre”, por eso es que todavía se sigue asociando profesiones ligadas a las artes como propias de gente rara o de hombres “mariscos” (cosa de discriminación a hombres gay), y profesiones como ingeniería siguen albergando al hombre cliché.

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"No hablamos muy a menudo de los hombres siendo presos de estereotipos de géneros, pero puedo ver que existen."

Sí, los hombres sufren hoy en día también de discriminación. Eso quiere decir que de alguna manera, el sistema ese que se ha intentado cambiar, sigue existiendo. Los hombres son prueba de que eso existe.

Y dicho sistema a mi parecer, lo que ha hecho es acoger a las mujeres en su seno, imponiéndoles ciertas condiciones a cambio de que preserven esa posición que han tenido los hombres por mera asociación genética como raza de mamíferos, en donde los machos en mayoría imponen su fuerza.

En otras palabras: a fin de cuentas, a las mujeres de alguna manera se les ha recibido en el mismo sistema que tiene a los hombres creyéndose que por tener un pene entonces “tienen un algo” superior (aunque estructuralmente, el psicoanálisis aporta de forma excelente una luz de conocimientos en cuanto a esta consideración que pudiera tocar en otro tema).

¿Ha notado, por ejemplo, que de unos años para acá a las mujeres “se les exige socialmente” ciertas cosas? ¿Se les exige ser un todo? Madre, ama de casa, mujer, trabajadora, estudiante, ser hermosa a costa de bisturí y cajas y cajas de cosméticos. Sí, el sistema de discriminación en ambos sexos sigue siendo tan mordaz como antes, solo que tiene otros colores por solo aceptar cosas como que las mujeres puedan trabajar o votar, o los hombres puedan botar una “lagrimita” muy de vez en cuando.

“HeForShe” me hace recordar que las diferencias entre los sexos son finuras sutiles y que los hombres debemos reinventarnos y las mujeres reencontrarse. Pero no reinventarnos para “ser cada día mas como…” ni reencontramos para volver para atrás. El reto es que nuestras diferencias existen como sujetos, como pensantes, y si algo podemos hacer juntos para hacerlas valer, tal vez valga la pena.

Emma Watson invita a los hombres….y a las mujeres a dejar de lado lo que considero una lucha estéril entre el feminismo como bastión de las mujeres para colocar su vagina como órgano sexual superior, en contra del sistema que ha favorecido a los hombres.

Es una lucha en contra de una discriminación que nos afecta a todos. ¡Bravo Emma!

Si quieren leer su discurso, pueden revisarlo haciendo click aquí


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